jueves, 11 de febrero de 2010

una brújula hacia el mediterráneo..


sólo unas palabrillas para deciros a todos que muchas gracias por vuestros comentarios e i-mails, que nos hacen muchísma ilusión y nos hacen estar siempre en contacto. La verdad es que os echamos de menos y nos acordamos mucho de vosotros y de la nostra terreta, así que se agradece mucho que esteis siempre ahí. besets y esto va por ustedes!!

Rotorua

Vamos bajando hacia una de las zonas volcánicas más activas de la isla norte: Rotorua, que se haya plagada de chimeneas y cráteres por los que la Tierra libera presión como si de una olla gigante se tratara. Esto se debe a que las placas terrestres que flotan sobre el magma chocan en esta zona, dando lugar a innumerables géiseres, manantiales termales y nubes de gas sulfuroso que le dan un particular “olorcillo” a huevo.

La ciudad es muy acogedora, llena de gente, y estamos muy contentos de llegar de nuevo a la civilización! Este es el Museo de Rotorua, que se construyó como un balneario de lujo allá por finales de 1800, donde ya recibían turistas de medio mundo, venidos a probar los novedosos y rejuvenecedores tratamientos termales, entre los cuales pensaban que curaba desde el alcoholismo hasta la impotencia sexual (veges tú si..). Podéis ver delante un grupo practicando el croquet, un juego que pensamos trajeron los ingleses (algo entre el criquet y el golf).



Gran parte de la población de Rotorua es maorí, así que aprovechamos para ir a ver uno de los múltiples espectáculos con banquete (hangi) que ofrecen. La verdad es que fue muy bonito, lleno de turistas claro, pero es la única forma de poder conocer algo típico de los aborígenes de Nueva Zelanda. Nos explicaron el origen de sus tatuajes, que suelen ser espirales que imitan las hojas del helecho desenrollándose, que representan la nueva vida y la pureza, y los picos de los pájaros, entre ellos el kiwi.
Después de ver unas danzas y unos hakas (típica danza de guerra de los hombres), nos dimos un buen festín de pollo, cordero y verduras cocinadas en un hangi, que es un horno hecho en la tierra, en el cual se pone la comida sobre brasas calientes, y se tapa con mantas húmedas y tierra durante unas 3h, hasta que este bien calentito, ummm!!

Una de las reservas termales más famosas es Wai-O- Tapu, que significa “aguas sagradas”, donde pudimos ver piscinas de aguas burbujentas como la famosa “bañera de champagne” o un géiser que explota todos los días llegando a alcanzar los 20m de altura.




A un paso está el manantial de Waikite,, la mayor fuente de agua termal de la zona (libera entre 40-50l por segundo, a unos 95ºC!!!!). Ahora, parte de este agua se enfría hasta unos 27-30ºC y se lleva hasta las maravillosas, increíbles, fantásticas y relajantes piscinas, donde te puedes dar un bañito (o dormitar durante horas, como hicimos nosotros!!). En fin, esperamos que estas imágenes no causen mucho mal y continuéis queriéndonos igual..



COROMANDEL PENÍNSULA

Después de pasar unos 10 días en la primera granja, vamos a pasar unos días de turismo para descansar un poco antes de la siguiente. Cogemos rumbo sur y pasamos a ver la Península de Coromandel, que tiene unas playas preciosas en el norte, pero al cual no podemos llegar por falta de tiempo.
Nos quedamos por el sur, haciendo unos senderos por el parque forestal de Coromandel, lleno de helechos y kaoris, y donde por fin pudimos estrenar nuestro coche como tienda de campaña, la verdad es que se duerme bastante bien!! En Nueva Zelanda tienes un montón de sitios donde pasar la noche, son los DOC, o zonas de acampada del Departamento de Conservación, que suelen tener baños, duchas y algunos incluso cocina, y si no, pues nos la montamos nosotros!! ya veis que fam no patim!!




Al día siguiente fuimos a Opoutere, en la costa este, una playa larguísima y sin gente, pero con muchos pájaros ostreros, donde puedes pasear a tus anchas. Ahí tenéis al amigo dándose un atracón (abren las conchas con su largo pico y se hinchan a berberechos!). Nos faltó tiempo para ir a otra playa emblemática, la Hot Water Beach, en la que dicen que puedes cavar tu propio spa en la arena, ya que surge agua caliente por debajo de la superficie. Lo que sí que pudimos ver son algunas playas de los ricachones de Auckland, que tienen hasta su propio aeródromo donde aparcar los helicópteros y avionetas.. no veas, menudos chaletitos!!



Aquí estamos en el albergue, que estaba justo enfrente de la playa. Aquí los pueblos no suelen estar cerca de la costa, excepto en algunas bahías. Y es que las mareas suben y bajan muchísimo, no como en el mediterráneo, que ni nos enteramos..

viernes, 5 de febrero de 2010

para los papis recientes y futuros..

Esto va dedicado a los futuros papas en Benifaraig y Berlín (les meues xiquetes!), así como a los recientes papis, Silvia y Fernando... nos acordamos muchísimo de vosotros, que ilusión conocer a los pequeñuelos para cuando lleguemos!!!! disfrutar mucho este camino, os queremos un montón!!

WAIPOUA FOREST PARK

Aprovechamos el día libre que teníamos en la granja para ir hacia el norte, a visitar Waipoua. Este parque forestal es una joya, uno de los últimos bosques nativos de Nueva Zelanda. Los ingleses acabaron con casi todos los árboles, algunos de ellos con más de mil años, para utilizarlos en la industria maderera. Así que lo que eran unas islas completamente pobladas de árboles primarios, se han convertido hoy día en pastos para las 10 millones de ovejas del país (que sólo tiene 4 millones de habitantes). Esta es una foto de los ingleses haciendo de las suyas:



Esta reserva cuenta con unos de los seres más antiguos de la isla, los kaoris: son unos árboles de la misma familia de las araucarias (como las del chalet centella!), pero con un tronco mucho más ancho, aunque el tipo de hojas y frutos (piñas) son muy parecidos.. Ellos, junto con helechos arbóreos, palmeras y totoras (otro árbol autóctono), forman uno de los ecosistemas más antiguos de la tierra. !Que pena que queden tan pocos! Ahí van unas fotos para que veáis lo bonitos que son:







Tane Mahuta es el dios del bosque. La leyenda maorí dice que era hijo del dios cielo y de la diosa tierra, que estaban fundidos en uno sólo, y Tane los separó para traer luz, aire y espacio para permitir la vida de todos los seres. Tiene “sólo”casi 2000 años (unos poquitos más que l´olivera grossa) y mide 51m!! La verdad es que era impresionante contemplarlo.. lo único que nos parecía un bosque un poco triste, porque no se oía nada, ni pájaros apenas, y es que entre lo devastado que está y que no hay mamíferos (en nueva zelanda sólo hay aves, peces y algún mamífero introducido) daba la impresión que los árboles estaban melancólicos..
Uno de los pocos animales que pueden verse (si tienes suerte!) es el kiwi, un ave del tamaño de una gallina que pulula por las noches y está en peligro de extinción.. cuidadín no la atropelles! Y hay que tener mucho cuidado con los perros, que una vez se escapó uno y estuvo perdido unos días en uno de los bosques y se cargó 500 de los 900 kiwis que vivían allí...
Para evitar esto en muchos parques crean lo que llaman “islas de tierra”, ya que están rodeados por una valla que evita la entrada de depredadores como conejos, topos, perros, possons (un marsupial que llegó de Australia y ahora campa por aquí a sus anchas), ratas...


Y eso es todo amigos!! nos vemos en la próxima cita!!